viernes, 29 de septiembre de 2017

Bombolí y escuelas, el tercer llamado

Vuelvo al tema Bombolí porque es un tema que se relaciona con temas que suelen parecer abstractos pero que son en realidad elementales en la naturaleza social del hombre. Por ejemplo temas que hoy se denominan como participación ciudadana, empoderamiento ciudadano, ejercicio de la ciudadanía, el derecho a la ciudad, no es en la práctica nada más que el esfuerzo de personas que se reúnen a organizar actividades con el fin de hallar una solución y poner manos a la obra a un problema de la comunidad en que habitan.  Aunque seguro hay quienes dirían que es un grupo de personas que no tienen nada que hacer. De hecho es interesante reconocer el esfuerzo de aquellas personas, porque además de cumplir con sus tareas para conseguir para la sopa, ese grupo de gente se da tiempo para que hablar de esos problemas y temas que los gobernantes no ven o no quieren ver. Dar el  paso de dejar de lado tiempo de descanso, la familia o el deporte para ocuparse de temas que afectan la sociedad es una cualidad innata de pocos pero que por suerte puede ser puesta en práctica por cualquiera con la sola voluntad de buscar a otro con quien dialogar, organizarse y actuar. Con esa lógica se construyó la primera red de agua para la ciudad, con la misma lógica se han creado establecimientos educativos, cooperativas de vivienda e incluso iglesias y hasta la provincia. La tradicional minga, ese esfuerzo comunitario para solucionar problemas es lo que hoy decimos ejercer ciudadanía, es mostrar empoderamiento ciudadano, es en muchos casos la defensa de espacios comunes en la ciudad, que viene a ser reclamar el derecho a una ciudad justa.

Vista del Bombolí, Foto autor y año por mi desconocido, tomado de panoramio.com

Hay ciertas cosas que impulsan la organización social, normalmente sucede cuando aquellos que son remunerados para ocuparse de los problemas de la sociedad no cumplen con sus obligaciones oportuna y adecuadamente. ¿Y cuándo nadie da el primer paso? Suele pasar que los actores están débiles a las estructuras de poder, las que mediante mecanismos de control como evaluaciones, dependencia financiera limitan una respuesta normal a una problemática. Cuando esta situación es la regla, se corre el riesgo de que ese miedo a reclamar se transforme en una cotidianidad considerada normal que por una parte explica el que nadie dé ese primer paso, y segundo muestra que es necesario volver a despertar ese sentido innato a protegerse como comunidad.

El Bombolí representa a la vez la oportunidad de fomentar la discusión sobre la ciudad que se quiere, sobre esto me pregunto ¿Qué dicen los centros de estudios al respecto, que dicen las escuelas, los colegios, las universidades de la provincia Tsáchila?  Los centros de estudios son un sector privilegiado de la sociedad que tiene la suerte, el tiempo y obligación de estudiar la comunidad, ¿por qué no hacerlo sobre la ciudad en que viven? ¿Quién sino ellos son quienes tienen la posibilidad de realizar actividades educativas, artísticas y científicas  destinadas a analizar lo que pasa con el Bombolí y la ciudad? ¿A donde miran los profesores y estudiantes mientras se pierde un ícono urbano? ¿Quienes sino ustedes son los llamados a despertar el sentido de comunidad santodomingueña? 


Este es entoces el tercer llamado.


martes, 12 de septiembre de 2017

Bombolí, el nuevo Monte de la Tentación

A poco días de conocer que en nuestra ciudad (Santo Domingo-Ecuador) se construirá un monumento a Cristo con fines de turismo, me hizo pensar que la curia fue tentada por diablo. Se acuerdan de El MONTE DE LA TENTACIÓN?. Tiene mucho valor para los cristianos, fue ahí donde Jesús fue tentado por el diablo, luego de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches.

La curia puso un pie en el Bombolí años atrás con la construccion de una iglesia y las 14 estaciones de la pasión de cristo, ahora piensa poner el otro con la construcción de un cristo, despojando asi a la ciudadania del principal mirador de la ciudad y constituyendole al Bombolí como parte privada de la curia.

Jesús logró salir ileso de las tentaciones de satanas, pero la curia? Al parecer la curia cayó en la tentación. Tener en sus manos el principal mirador de la ciudad es un privilegio que no va a dejarlo ir fácilmente, menos aún si lo ponemos en terminos de turismo y este a su vez en terminos monetarios. Vemos que la Curia tiene el ojo bien puesto en uno de los lugares más preciados de la ciudad.

Si pensamos en términos de qué es mejor para la ciudad y su gente, y qué lineas nos guian a generar atracción de turistas, vemos que una sola opcion no es la solución. Pero el Bombolí naturalmente ha sido un espacio de la ciudad que no ha sido utilizado sosteniblemente, pero ahí muy bien se puede gestionar con recursos públicos y privados espacios para el turismo sostenible, tales como: Pensar en convertirla en reserva turística y ecológica, por ende la prohibición de construcción de urbanizaciones sobre el Bombolí y generación de espacios deportivos y de aventura.

Estamos a tiempo de no caer en la tentación de la Curia. Hoy más que nunca debemos rescatar al Bombolí y devolverlo a la ciudad.

Por: el Ingeniero Juan Piedra


miércoles, 6 de septiembre de 2017

El llamado del Bombolí II

El Cristo del Bombolí

Situación actual

Desde hace poco es de conocimiento público que en la cima del monte Bombolí se construiría un monumento de 50 metros de altura. 3 principales inversionistas con el respaldo del Obispo y el aval del Alcalde de la ciudad de Santo Domingo han puesto en marcha tal proyecto. Al momento se colocó la primera piedra y se empezo con la construcción.

En el transfondo el Bombolí.
Fuente: Diario La Hora Enero 2016

El proyecto se presenta a la ciudadanía como un proyecto que fomentaría la actividad turística a la ciudad y que con los fondos que se reciban por concepto de pago de entrada al mirador ubicado en el monumento, la Curia, es decir la Iglesia Católica, pueda financiar sus proyectos sociales.

Objeciones al proyecto, nuestro reclamo

Sobre lo económico 

Se conoce de los inversionistas que al momento se cuenta con el financiamiento del 18,75% de un total de 2,4 Millones de dólares. El resto se financiaría con varios aportes tanto del sector privado como mediante actividades sociales de recolección de dinero como rifas, etc. De lo que se conoce, tanto los fondos ofrecidos como los que faltan de recolectar carecen de una organización legal que los administre.

Si falta financiar el 81,25% del presupuesto, se presenta como una obra cuyo plazo de culminación queda abierta, bien podría acabar de construirse en dos como en 50 años, si se observa que el modelo de financiamiento es el mismo usado para la Catedral de Santo Domingo, que aún esta sin terminar de construir. Nos preguntamos: ¿Quién es o sería el responsable de conseguir esos fondos? ¿Hay un proyecto económico de financiamiento del proyecto?¿a quién reclamaremos que la existencia de una obra de 50 metros de alto sin terminar de construir? 

Aspectos técnicos 

Un proyecto de esta magnitud requiere de ciertos aspectos técnicos a considerar, puesto que se trata de algo equivalente a un edificio de 26 pisos, según los propios inversionistas. Al respecto es necesario conocer:
1 ¿Hay estudios de suelo que indiquen que es posible llevar a cabo este proyecto?
2 ¿De qué material será el monumento? ¿Hay un boceto del monumento?
3 ¿Hay un proyecto de ingeniería de resistencia de la construcción?
4 ¿Tienen permiso de construcción municipal? ¿la dirección de planificación municipal aprobó los planos, conoce del proyecto?
5 ¿existe un estudio de impacto ambiental para esta construcción? ¿Cuáles son los efectos negativos y las medidas de remediación propuestos? ¿Cuánto afecta esta obra a la fuente de agua presente en el Bombolí? ¿Tiene el MAE conocimiento de esto?
6 ¿Hubo algún pronunciamiento por parte del concejo municipal?


Sobre lo estético 

Un monumento representa a la vez que una imagen puntual, representa al momento en que este fue realizado. ¿Qué imagen, tipo de material sería el que representa la actualidad santodomingueña y que se piensa dejar como recuerdo de nuestros días a las futuras generaciones?  Por eso saltan como canguil muchas preguntas, de las que se escogieron las siguientes:
1 ¿Quién lo hará? ¿un artista, un ingeniero, un artesano?
2 ¿En dónde se hará, en Santo Domingo, en San Antonio de Ibarra, en el país, en el extranjero?
3 ¿y sobre la base de qué parámetros se decidieron las características de tal monumento?

Sobre asuntos legales

El incumplimiento de los requerimientos técnicos vuelve a este proyecto ilegal, igual de ilegal que una invasión a un área verde municipal y debe ser sancionada de igual manera, porque en un país de derecho, la ley esta sobre los inversionistas.

Nuestro pedido

A las autoridades, que nos respondan con documentos y en forma urgente si es que nuestras observaciones técnicas se cumplen o no. Y en el caso de no cumplir con normas técnicas y legales, tomar en defensa de la ciudad las medidas correspondientes. 
A la ciudadanía, se pide gentilmente entender que estas objeciones o reclamos se hacen sobre la base del respeto a las creencias religiosas. Se deja muy en claro que eEsto no se trata de algo contra la iglesia católica o de “catolicismo fobia”, se trata de una discusión sobre el desarrollo urbano y el uso de suelo de un hito de la ciudad y su impacto sobre el paisaje urbano. Los ciudadanos deben regresar a ver al Bombolí porque posiblemente nunca más será como es, o como que pudo ser, un parque arbolado, un verdadero pulmón de la urbano. Preguntémonos si queremos tener una especie de Virgen del Panecillo en el Bombolí, pero más grande.  ¿Por cierto a quién le dará la espalda el cristo de 50 metros?

Nuestra exigencia

A los iniciadores de este proyecto. Que lo dejen, que paren, que vuelvan a pensar la propuesta, que no solo porque suena como una bonita ocurrencia, está bien. Su proyecto tiene muchas deficiencias e incoherencias que como se empezó a hacer, seguiremos demostrando poco a poco.
Sin técnica, sin plan de financiamiento serio, sin responsables directos, sin pensar en la ciudad mas allá de una iniciativa privada, sin pensar que están tratando del espacio público, del paisaje urbano futuro de esta ciudad está interesante iniciativa deja de ser positiva para la comunidad. Pensar una propuesta de impacto urbano es más profundo que el plantearse construir en su finca una urbanización cerrada. Las ciudades del futuro requieren entre otros de pulmones verdes antes que elefantes blancos. Nosotros queremos que nuestra ciudad siga teniendo el atardecer hermoso, luminoso y disfrutarlo así como diosito nos lo dió, libre y verde.

Finalmente es necesario mencionar que las aquí expuestas son solo algunas importantes inquietudes recogidas de discusiones realizadas en charlas, mediante intercambio de correos electrónicos y de chats en redes sociales como Facebook y Whatssapp, dichas ideas fueron organizadas y dieron forma a este texto. Esperamos que en marco del respeto a la libertad de expresión y la democracia, este pensamiento sea recibido con madurez y compromiso para la sociedad, que requiere de respuestas a lo aquí planteado. 

Con la esperanza de encontrar respuestas nos suscribimos, 

Muy atentamente, 


Santodomingueños de a pie, de en bice, de en bus, en camineta y otros más enojados con esta situación

martes, 5 de septiembre de 2017

El llamado del Bombolí

Estimados lectores,

Este blog se caracteriza por ser un espacio  para exponer ideas y para refutar con argumentos las acciones que creemos  afectan positiva o negativamente a la ciudad de Santo Domingo de los Colorados y su región. De hecho este espacio existe porque creemos que mediante este ejercicio de reflexión y propuesta, se ejerce ciudadanía. Por ello aprovecho esta oportunidad para invitar a quienes deseen participar con sus aportes en este espacio. 


A partir de esta publicación es nuestro interés central debatir el tema de desarrollo urbano, con foco en el espacio urbano y al proceso de toma decisiones sobre este espacio. Lo que motiva ésta discusión es la construcción de un monumento sobredimensionado en uno de los principales hitos de esta ciudad, el Bombolí. Tomar a la intencion de construir el monumento mas grande de latinoamérica como hito para iniciar una discusión de este tipo en este momento es la mínima respuesta que se puede dar desde la sociedad civil, y nosotros tomamos este llamado del Bombolí como un ejercicio de pensar la ciudad del presente y el futuro. 

El pensar la ciudad dejo de ser asunto exclusivo de los arquitectos o ingenieros. De hecho la construcción de la ciudad se hizo desde la iniciativa propia de sus pobladores, que en ausencia y/o debilidad del gobierno local establecieron emprendimientos a lo largo y ancho de la ciudad. Pensar la ciudad representa en este caso un llamado a los actores sociales que ejercen ese poder sobre la ciudad, un llamado a observar y revisar los mandatos de una ciudad moderna, una ciudad inteligente. En este pensar la ciudad es importante tanto la técnica como el sentido común, tanto la voz de los inversionistas como de los ciudadanos de a pie, por eso desde distintas ramas profesionales o grupos de edad y sectores económicos  se puede opinar sobre este tema, ahí radica su riqueza.

Vista panorámica del Bombolí, su altura destaca sobre el relieve en medio de la urbe.
Foto de Byron Canga, 2015
El Bombolí es una cima que caracteriza el paisaje urbano y es un balcón natural para los santodomingueños. Hoy este espacio se encuentra en un momento sensible, en un punto de quiebre en el que se decide el tipo de uso que se le dará a futuro donde las opciones son seguir con la urbanización y uso masivo o proponer un nuevo uso de este espacio urbano. El paso que se va a dar hoy es importante porque no hay vuelta atrás.

En la serie de artículos que presentamos a continuación se presentarán opiniones, argumentos, críticas a la construcción del monumento en el monte Bombolí.

Espero que esta nueva línea de publicaciones sirva para alimentar la cultura del debate en la sociedad santodomingueña, lo cual solo puede hacerle bien a la ciudad.

Afectuosamente,

Hugo Torres López
@hugotapir

lunes, 17 de abril de 2017

Exposición de Ideas


Alrededor de 1950, Quito contrata su primer Plan Regulador. Jones Odriozola, arquitecto Uruguayo que estuvo al frente del trabajo, realizó propuestas como las de reubicar a la Universidad Central que en ese entonces funcionaba en el centro de la ciudad; el estadio del arbolito dio paso al Atahualpa; se trazó las Naciones Unidas, con un ancho que en ese entonces parecía un despropósito; se propuso la creación del parque la Carolina, entre tantas cosas que hoy son una realidad para la Capital. A muchos les parecía que las ideas del Consultor rayaban en utopías, pero en la actualidad nadie duda de lo acertado de las recomendaciones. Sin duda un Plan audaz, valiente, desafiante, visionario, que le hizo mucho bien a la ciudad.
De cara al futuro inmediato, Santo Domingo requiere un Plan que tenga la audacia que requiere el ordenamiento de la ciudad para enfrentar de manera adecuada su rol de centro de abastecimiento de la región. El Plan de Quito no se  detuvo a pensar en su costo, sino en su trascendencia. ”El hombre es Dios cuando sueña, pero esclavo cuando cuenta” parecería el criterio con el que Odriozola enfrentó su trabajo.

Qué tal si entre todos ayudamos a enriquecer nuestro PDOT? El CREDES está convocando a que la ciudadanía en general dedique unos minutos a formular una idea que apunte a mejorar la ciudad. Puede referirse a cosas muy puntuales como utilizar un espacio actualmente vacío o llegar a una propuesta completa de reordenamiento urbano. No dejemos que ese campo sea potestad exclusiva de los arquitectos, juguemos a que somos el Odriozola que Santo Domingo necesita. Los trabajos serán expuestos al público con motivo de un Simposio en el que evaluemos nuestro Plan de ordenamiento. Bien vale un pequeño esfuerzo. Se anima, amigo lector?

martes, 28 de febrero de 2017

Los barrios San Antonio y Skiner

La relación que existe entre el campo y la ciudad, es mucho más evidente en el caso santo Domingo. Miles de trabajadores que vinieron a desbrozar montaña, al cabo de unos años terminaron asentándose en la ciudad. Conozcamos el caso de los barrios San Antonio y Skiner.
Antonio Granda Centeno era propietario de la Hacienda San Antonio, ubicada  en el 40 de la Quevedo. Amplió su propiedad al comprarle a John Skiner la hacienda que llevaba su nombre. La primera la dedicó a la ganadería; la segunda al banano.
El proceso de cultivo y embarque demandaba la mano de obra de seiscientas personas, que de pronto quedaron cesantes cuando Centroamérica irrumpió en la producción de la fruta, que al no tener que pasar por Panamá, se colocaba en ventaja en el mercado.  
Desde 1970 la Skiner pasó a producir palma africana. Se reclutaron nuevamente trabajadores que prácticamente vivían en la Hacienda, semejando un pequeño poblado. Había viviendas colectivas al estilo de los cuarteles militares complementadas con dispensario, escuela, comisariato.

Los trabajadores estaban divididos en grupos.  A las cinco de la mañana sonaba una campana que indicaba la hora de levantarse; a las seis cada grupo formaba frente a su jefe antes de empezar la jornada.    Podría decirse que el ambiente de trabajo era agradable, lo que dio pie a que le planteen a Granda Centeno la aspiración de contar con viviendas en Santo Domingo, pensando en que un día necesitarían  estar cerca de los centros educativos. El pedido fue atendido favorablemente, por lo que se negoció en condiciones ventajosas una parte de las tierras que el hacendado tenía en esta ciudad. Así se originaron esos barrios que tomaron el nombre de sus sitios de trabajo. Pocos de los que allí habitan son propietarios originales.       

lunes, 13 de febrero de 2017

Lo que quedó de un sueño

por: Víctor Hugo Torres 

Los  pioneros en la construcción de esta ciudad tienen el mérito de haber sentado las bases de nuestra institucionalidad. Soñaron mucho pero trabajaron duro para concretar sus sueños.  Uno de esos logros fue resolver el problema de la energía eléctrica que demandaba la naciente  ciudad que se iluminaba con faroles en sus postes, lámparas a kerosene en las casas y con lámparas Petromax en sus locales comerciales. Un primer salto lo dio un empresario cuando decidió adquirir un generador y vender luz a sus vecinos.

Sin duda que la falta de energía frenaba el desarrollo, por lo que se hacían gestiones ante el gobierno y en el extranjero. Finalmente se halló eco en una Cooperativa de Kentucky, Estados Unidos, que se ofrecieron a replicar su  experiencia. Con ese referente y con su apoyo material, se inició la organización de la Cooperativa de Electrificación Rural Santo Domingo Ltda. que alcanzó un éxito rotundo al brindar servicio a toda la región. Cada persona que tenía un medidor a su nombre era socio de la Cooperativa, de tal manera que en su apogeo, pasaron de treinta mil sus miembros.  Sin duda la Cooperativa de electrificación es el mayor logro tangible del esfuerzo colectivo a juzgar por el servicio que brindó y por el patrimonio que llego a acumular.

La llegada del Sistema Nacional Interconectado marcó su fin. Inecel absorbió a la Cooperativa y por alguna extraña razón entregó su patrimonio a la Cooperativa de Producción Santo Domingo Ldta, constituida con alrededor de treinta miembros. Esa entidad inició la construcción de un Centro Comercial que nunca funcionó y finalmente fue adquirido por el Municipio. Cuando pase frente a la biblioteca Municipal puede admirar lo que quedó de un gran esfuerzo colectivo que se liquidó en manos privadas.


Artículo publicado en diario La Hora Ecuador Santo Domingo 13 de febrero de 2017